-Mexicana de Aviación, ¿volará?
-Una crisis de confianza
-Que no se repita la historia
Días atrás, Javier Lozano, soltó una frase lapidaria: “Nunca más otro caso como el de Mexicana de Aviación”, al tiempo que como secretario del Trabajo aceptó que PC Capital (nuevo dueño de la aerolínea) recontrató únicamente 30% del personal.
De las 8 mil 500 personas de la plantilla laboral de Mexicana de Aviación todos fueron liquidados y 2 mil 550 recontratados con nuevos condicionamientos y un contrato colectivo de trabajo distinto. En tierra quedaron desempleados 5 mil 950 extrabajadores.
En general al nuevo dueño lo adulan por su operación exitosa, porque fueron compradores, de ser así entonces ¿qué es un fracaso?
El secretario del Trabajo no puede sentirse ni orgulloso ni tranquilo después del robo consumado contra las finanzas de Mexicana de Aviación, de provocar más desempleo en un país cuyo Gobierno hizo campaña electoral a favor de precisamente lo contrario.
Nadie puede estar satisfecho porque en este caso se omitió una acción esperada por muchos: justicia.
No hubo encarcelados ni responsables y mientras no exista justicia seguirá siendo un acto de fe aguardar que no suceda otro caso similar porque nadie garantiza que el día de mañana un abarrotero millonario decida que puede hacerse de un banco; “zapatero a tus zapatos” pero no basta con la buena expresión de Lozano para evitar un nuevo pillaje en una empresa de raigambre.
De los exempleados de Mexicana de Aviación el desasosiego es evidente, atraviesan por el camino de la incertidumbre a finales de año e iniciarán otro año con la cuesta de enero y las dificultades del sector de la aviación para colocarse de nuevo en circulación.
Para los usuarios, si bien es cierto que la oferta de líneas aéreas que cubren rutas nacionales es reducida y que la ausencia de Mexicana de Aviación en el espacio aéreo doméstico provocó un incremento en las tarifas y una saturación en la demanda por reservaciones y boletos, persiste un sentimiento de desconfianza.
Desde agosto pasado dejó de volar Mexicana de Aviación provocando una afectación contra miles de pasajeros que con boleto en mano debieron quedarse en tierra en pleno verano.
Muchas personas perdieron su dinero, muchas vieron frustradas sus vacaciones porque con anticipación adquirieron paquetes de todo incluido avión, hotel y alimentos y al llegar al destino de origen no les fueron reconocidos.
Otras miles más se agruparon y levantaron quejas ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco)) siendo uno de los casos de atención más significativos de los últimos años.
De esta forma la Profeco atendió a 7 mil 500 personas quejosas, el Ombudsman del consumidor determinó que la línea aérea deberá reembolsar 85 millones de pesos.
Hasta el momento no queda claro si una vez que Mexicana de Aviación regrese a los aires a mediados de enero recurrirá a los reembolsos en efectivo o especie.
Por eso subrayo la crisis de confianza porque de la noche a la mañana la línea aérea dejó de volar no le importó si dejo familias sin transportarse, personas de negocios impedidas de llegar a sus citas, enfermos que no pudieron transportarse o tantas otras historias inclusive transcontinentales. Además, quién garantiza que PC Capital no repetirá la misma acción en el corto plazo sino le funciona la administración con la línea aérea.
A COLACIÓN
Los nuevos dueños de la cuarta compañía aérea más añeja del mundo anticipan que para la primera quincena de enero Mexicana retornará a los aires para ir calentando motores rumbo a Semana Santa.
El espacio aéreo por recorrer quedará redefinido, por lo pronto comenzarán operando con mínimos en todos los sentidos, entre 20 y 30 aviones y con el 30% del personal.
Antes de la quiebra Mexicana contaba con aviones Boeing 757, Boeing 767, Airbus A320; A319 y A318.
Desde 2007, la empresa adquirió aviones Airbus para sustituir los Fokker 100 que traspasó a Click, su entonces subsidiaria de bajo costo.
Cabe mencionar que con la adquisición de los Airbus, Mexicana convirtió en la primera línea área en toda América Latina en invertir en dichos aparatos, ampliar su capacidad de atención para mayor número de pasajeros y renovar la edad promedio de su flota.
PC Capital no ha informado cuál es el número total de aviones de la flota de la nueva Mexicana de Aviación, antes de su quiebra contaba con más de 40 Airbus, recién había inaugurado su ruta de México-España y movilizaba a 11.1 millones de pasajeros en conjunto entre todas sus rutas.
Bajo el nuevo feudo de PC Capital no se sabe a ciencia cierta qué pasará con esta versión corregida de Mexicana de Aviación, qué sucederá con sus rutas, cómo será la atención; las nuevas tarifas ni la relación precio-calidad.
Lo único es que llama poderosamente la atención que una línea aérea de su relevancia en el mercado nacional funcione con mínimos, entendamos no se trata de una empresa que hace salsa de tomate y que puede despedir a la mitad de sus trabajadores porque los sustituyó por máquinas.
Aquí la pregunta es quién garantizará la seguridad de Mexicana de Aviación con el 30% de su personal. Como usuarios no sabemos cuánta gente hay en mantenimiento, cuántos pilotos capaces; hay gente cuya actividad es vital para mantener la calidad y seguridad de los aviones.
Me pregunto qué autoridad se ha tomado la molestia por averiguar con PC Capital que ésta vaya a respetar estándares imprescindibles para evitar un accidente. De por sí Estados Unidos señala la serie de deficiencias no únicamente en Aeropuertos mexicanos también en el protocolo en los aviones nacionales.
En mi opinión el culebrón con Mexicana de Aviación no termina todavía, es muy doloroso lo sucedido con sus trabajadores, la cantidad enorme de gente en la calle; la impotencia porque en esta quiebra no hay acusados, ni nadie en la cárcel y moverse así bajo el amparo de la arbitrariedad no hace más que abonar en terreno fértil para la impunidad.
P.D. Le invito a que opine del tema en mi blog http//claudialunapalencia.blogspot.com.