Nuevo Laredo, Tamaulipas.-Los elementos de protección civil instalados en el kilómetro 26 durante la pandemia revisan a las personas que ingresan a la ciudad, y lo hacen con los pasajeros de 70 autobuses comerciales y de 150 vehículos particulares con familias que cada día llegan a esta frontera; la finalidad es que tengan colocado el cubrebocas y que no tengan los síntomas del COVID, ya que a todos se les informa de las medidas sanitarias a seguir al ingresar a Nuevo Laredo.
Pero no todos hacen caso, ya que algunos viajeros hacen caso omiso de las recomendaciones, se molestan e incluso se quitan el cubrebocas.
Omar Enríquez, jefe de Protección Civil y Bomberos, mencionó que a los viajeros que llegan a la ciudad, se les informa en dicho punto de inspección que esta frontera está cerrada al paso de visitantes, ya que el cruce a Estados Unidos está también restringido.
œSe les dice que si no tienen justificación para visitar la ciudad de Laredo, Texas, se regresen, y se lo decimos para que estén informados, pero si quieren cruzar a Estados Unidos, pues ya es cosa de ellos, y eso es lo que estamos haciendo en el kilómetro 26, reiteró el funcionario.
Pese a que en algunos casos se detectó a personas que no tenían colocado el cubrebocas, no se les impidió el acceso a la ciudad, aunque reconoció que hubo casos de personas que regresaron por voluntad propia al saber de las restricciones y disposiciones sanitarias al estar en la ciudad.
EN algunos casos, comentó Enríquez que hubo personas que se negaron a colocarse el cubrebocas, bajo el argumento de que estaban en su derecho de enfermarse si así lo querían, a lo que les dijo el funcionario que era correcto, pero siempre y cuando respetaran el derecho de los neolaredenses de no ser contagiados por personas que no son de la ciudad.
œSe les dijo que aquí en Nuevo Laredo todas las personas tienen que usar el cubrebocas, pero en vez de colocárselo se regresaron en su auto y fueron solo dos casos, aunque uno de ellos se puso el cubrebocas y el otro fue muy impertinente, ya que al decir que estaba en su derechos, le dijimos que no tenía derecho de venir a enfermar a nadie en esta ciudad, explicó.
Refirió que como esa persona estaba muy terca en decir que estaba en su derecho de enfermarse si así lo quisiera, y como respuesta recibió como invitación del funcionario una visita al hospital COVID, por hizo que de inmediato se colocara el cubrebocas, por lo que se le dejó ingresar a la ciudad.
Sin embargo, reconoció el funcionario que mucha gente que llega al punto de revisión sanitaria del kilómetro 26, solo pasa este lugar y de inmediato se quita el cubrebocas y lo tira, por lo que insistió en que las campañas de concientización hacia los ciudadanos se fortalece con el llamado a que sigan las recomendaciones de las autoridades para reducir la cantidad de contagios.

