Ya solo falta que Israel bombardee España o bien sus agentes del Mossad provoquen alguna catástrofe deliberada en alguna parte del país ibérico: la mala sintonía entre el gobierno del presidente Pedro Sánchez y el gobierno israelí está en la cresta de la ola.
Sánchez recién anunció nueve medidas contra Israel por cometer, así lo dijo: “un genocidio contra la población civil indefensa de Gaza” y tiene razón en decir lo que ha dicho porque esto ya no es una venganza, no es defender los intereses nacionales es exterminar por qué sí a una población civil que no tiene los medios para defenderse.
El mandatario español ha refrendado, además, que este posicionamiento ubica a España en el lado correcto de la Historia y es que, en un mundo polarizado donde todo es o blanco o negro, definitivamente coincido no hay postura moral, ni ética, que se sostenga contra lo que el gobierno de Netanyahu está cometiendo.
Entre las medidas de España, aplicarán un embargo total de armamento contra Israel y también prohibirá la entrada a toda persona que haya participado o esté participando en la masacre de los palestinos, la violación de sus derechos humanos y esté cometiendo crímenes de guerra; entre otras más anunciadas.
El gobierno de Netanyahu (vaya ser más abominable) ha respondido calificando de corrupto y antisemita al gobierno de Sánchez y prohibiendo además la entrada a Israel de Yolanda Díaz, ministra del Trabajo y vicepresidenta del gobierno y de Sira Rego, ministra de Juventud e Infancia.
Si bien el ministro de Exteriores de España ha reiterado que no hay ninguna intención de llevar las relaciones entre ambos países al límite o casi a la ruptura, en lo más reciente se ha vetado la entrada al país ibérico a los dos ministros ultranacionalistas y ultraortodoxos de Israel, Itamar Ben-Gvir y Bezalel Smotrich.
Pero también las calles de España dejan sentir su furia y enojo contra el genocidio en Gaza. La Vuelta está siendo constantemente interrumpida por miles de manifestantes coléricos e indignados con cientos de banderas palestinas que salen al paso del pelotón y del equipo israelí.
Nadie con ningún tipo de argumento puede defender aunque sea un poquito y con la frente en alto, que Netanyahu esté arrasando con un pueblo entero atrapado en una ratonera llamada Gaza. No puede huir, ni siquiera por mar porque desde 2013, Israel aplica un control militar en las aguas de la bahía de Gaza. ¿Cómo hemos llegado hasta aquí?
Ya no es cuestión de la solución de Dos Estados, que no la habrá nunca, porque Israel jamás ha tenido la voluntad de respetarla y de su lado está la Casa Blanca avalando su conducta colonizadora y robando un país a los palestinos que hoy en día son minoría cuando hace 80 años eran mayoría. Los culpables de este desastre son Estados Unidos y Reino Unido.
La población palestina va camino de la aniquilación no solo no tendrán un país suyo en el que vivir, sino que tampoco habrá palestinos, porque Netanyahu junto con los sionistas ultra que se creen paridos por Dios, están dispuestos a seguir con la masacre.
A COLACIÓN
El gobierno de Netanyahu siente que tiene la potestad divina para destruir, aniquilar y bombardear a los países de su alrededor. Ayer, atacó a Qatar, a su capital Doha, y destruyó un complejo de edificios en el que se reunía la cúpula de Hamás y varios negociadores suyos para plantear un acuerdo de alto el fuego.
La soberanía de Qatar absolutamente violada, como las leyes, los acuerdos internacionales, el derecho y todos los acuerdos que significan equilibrios globales para no caer en la irracionalidad de atacar a otro país nada más por qué sí.
¿Y si los miembros de Hamás estuviesen refugiados en Ciudad de México o en Toledo? ¡Qué miedo! El ejército israelí los tendría en la mira para ser bombardeados en cualquier momento.
La ultraderecha solo trae guerra, destrucción, genocidio, viola los derechos humanos y bajo ese tufo supremacista en su soberbia pisa todo a su alrededor por lograr su cometido. Primero creó a Hamás, luego alentó a la Yihad Palestina… hay mucho por averiguar, por saber quién es el cerebro y financiador de la masacre del 7 de octubre de 2023.
Porque las coincidencias en la Historia no existen. Esto fue un plan perfectamente bien planeado, alineado en el tiempo con el retorno de Trump a la Casa Blanca. ¿Quién es el cerebro detrás? Desde luego no es Hamás, ¿Por qué querrían suicidarse y perder el control de la Franja de Gaza cometiendo las atrocidades del 7 de octubre? ¿Actuó la Yihad Palestina financiada por Netanyahu cometiendo y grabando las atrocidades para dejar testimonio al mundo? Ojo, la Yihad Palestina está ayudando a Netanyahu en el atropello que está cometiendo en la Franja de Gaza colaborando con el ejército israelí. Hay mucho que aclarar…