Carlos Peña Palacios/EnLíneaDIRECTA
Reynosa, Tamaulipas.- Entre lágrimas, sustos, llamadas de atención de Padres a hijos y la paciencia de los empleados al servicio de la Secretaria de Salud con vocación, así transcurrieron las primeras horas del inicio de la semana nacional de vacunación en la ciudad de Reynosa.
Como en otras regiones del país, esta situación aparentemente normal entre las familias se convierte en momentos de tristeza tanto para menores y sus Padres, pues la aplicación de las vacunas mediante inyecciones genera un dolor no conocido en ambas partes.
En términos de Psicología, a esta reacción se le conoce como un aprendizaje empírico (a través de los cinco sentidos) y forma parte también del término “Ensayo y Error”, una experiencia que van adquiriendo las personas en su vida.
Iniciar o continuar un esquema de vacunación de los seres humanos en sus primeros años de vida es la función primordial de esta vital fecha de las autoridades sanitarias.
En todos los menores de ocho años, y particularmente en los menores de un año, se aplican inyecciones en brazos y piernas de los infantes, una situación levemente complicada para sus Padres pues pareciera que al igual que sus hijos sintieren la solución inyectada pero que al final es por el bien de ellos y no escatimable en la salud de su familia.
Un total de 35 mil vacunas contra la polio cuenta la Jurisdicción Sanitaria #4 con sede en Reynosa para aplicarse también en los esquemas de vacunación como la Triple viral, Pentavalente, contra el Rotavirus y el Tétanos, también será administrada vitamina A, Hierro y Ácido Fólico a mujeres en embarazo.