Victoria y Anexas/Ambrocio López Gutiérrez/MALDITOS SEAN TODOS LOS QUE PROMUEVEN TODAS LAS GUERRAS

Está demostrado científicamente que las confrontaciones bélicas dan al traste con los sistemas financieros y erosionan dramáticamente los regímenes gubernamentales. Ejemplos sobran y me limitaré aquí a mencionar que la guerra declarada por Felipe de Jesús Calderón contra el crimen organizado ya colapsó al turismo luego de que varios países americanos y europeos han puesto a México en su lista negra por las constantes matanzas que acontecen a diario.
Los medios impresos y electrónicos reprodujeron la semana pasada las declaraciones de autoridades de la Universidad de Texas quienes explicaron que tuvieron que ordenar a los estudiantes de posgrado que estaban de intercambio en el Tecnológico de Monterrey que regresaran a los Estados Unidos porque el gobierno de esa entidad y la federación son incapaces de garantizar la seguridad de nadie. Adiós al ambicioso proyecto de Ciudad del Conocimiento diseñado por José Natividad González Parás.
“Malditos sean todos los que promueven todas las guerras” dijo Julio Anguita, líder de la izquierda española cuando supo que su hijo (reportero) había sido alcanzado por las balas en la “guerra santa” entre cristianos y musulmanes que sigue reproduciéndose en este “civilizado” siglo XXI. Creo que los familiares de cerca de 20 mil muertos en la guerra actual mexicana también tienen derecho a maldecir a quienes sólo conocen el lenguaje de la intransigencia y de las balas.
LA TÍA JULIA Y EL ESCRIBIDOR.
Mario es un joven peruano estudiante de derecho y a la vez trabajador de la radio panamericana como director de informaciones; la radio es muy propia dedicada a la gente culta y tiene como rival a la radio central, muy diferente en esencia pues es popular gracias a sus famosos radioteatros. Gusta de almorzar en esta última ya que, según él, sus instalaciones son más animadas que las de la suya. Los radioteatros son muy populares en Lima, aunque sus actores distaban mucho de asemejar su aspecto a sus maravillosas voces sin embargo mientras no se les observara, solo se les escuchara, no habría el menor problema.
En un reporte de David Cano Córdoba (sólo una probadita de la novela de Mario Vargas Llosa) se dice que los actores improvisaban sus actuaciones a menudo ya que el libreto, proveniente de Cuba, contenía muchos localismos que a veces lo hacía ininteligible provocando un desastre siempre antes de iniciar con la transmisión simplemente por ser una radio desorganizada. Esto se resolvió con el contrato de Pedro Camacho, un autor y actor boliviano cuya celebridad en su tierra hacía eco hasta Perú. Él escribía todos los radioteatros en que participaba.
Cuando Mario supo acerca de esta contratación fue el mismo día que conoció a su tía (política) Julia, divorciada proveniente de Bolivia también. Fue a comer a la casa de sus tíos Lucho y ­Olga, ella se encontraba descansando después de su divorcio, se encontraba en Lima para “cambiar de aire”; aunque la primera impresión que tuvo de ella fue de desagrado, pues lo trataba como a un niño, a final de cuentas días después ella lo invitó al cine para huir de un pretendiente quien creía que solo por ser divorciada ya no gustaba del romanticismo.
La historia se narra a la par con la vida de un apuesto doctor, Alberto de Quinteros, a quien la vida le ha sonreído pues tiene una hermosa esposa y una bella hija que se encontraban viajando por Europa en esos momentos. Él es invitado a una boda, la de su sobrina Elianita, quien es “más bella que lo describiblemente posible”, con el “pelirrojo” Antúnez, “más bien tontito”. Todo parece normal, excepto porque el hermano de esta, Richard, se observa cabizbajo e intranquilo, el doctor piensa que probablemente sea un lío de faldas.
Había acordado con la tía Julia salir al cine de nuevo el mismo día que salió con Pedro Camacho, esto provocó que la dejara plantada, ya que no tuvo noción del tiempo cuando caminaba con el actor. Fue por este motivo que decidió enviarle flores. A Julia le encantaron pero lo hizo prometer que volverían a salir aún así. Días después fue a visitar a su tío Lucho (ahí se encontraba hospedada la tía Julia) quien cumplía años y después de conversar animadamente, su pariente los convenció de asistir al Grill Bolívar para cenar y bailar un poco.
GAJOS DEL OFICIO.
***TODO ESTE BERRINCHE tiene su origen en la candidatura de Magdalena Peraza Guerra, a quien el PAN, por acuerdo estatutario, la designó como la mujer que en Tampico se necesita para ganar la Presidencia Municipal, encargo que no es tan difícil, tomando en cuenta el bajo perfil que tiene Miguel Mansur Nader, quien se convirtió en el abanderado del PRI.
LAS PANISTAS ANDAN en pie de guerra, ambas, tanto Silvia Cacho como Hilda Gómez, son altamente conocidas por su comportamiento público, y aunque ahora hablan de filosofía y valores, hay que recordarles que Magdalena Peraza, no llego por casualidad a la candidatura que ellas pelean, sino porque es una mujer con compromiso y es una mujer de resultados. (Benny Cruz Zapata).
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