Carlos Peña Palacios/EnLíneaDIRECTA
Reynosa, Tamaulipas.- Por increíble que parezca, desde la ciudad y en un laboratorio de 4 paredes, se le da una “ayudadita” al campo de esta frontera tamaulipeca…
“Su nombre lo dice es interacción planta-microorganismo, nosotros trabajamos principalmente con bacterias benéficas para plantas“, reveló María Antonia Cruz Hernández, Profesor interacción planta-microorganismo.
Es en el Centro de Biotecnología Genómica, al interior del Instituto Politécnico Nacional, donde al parecer un tipo de bacterias le hacen un bien al ciclo de producción de los cultivos por excelencia en esta región.
Cruz Hernández puntualizó: “Hemos tratado de abordar temas que puedan impactar en la agricultura local, se siembra maíz y sorgo, nosotros trabajamos con una bacteria benéfica para esas plantas, es decir, que les pueda aportar algún beneficio a ellos”.
Y es que los fertilizantes químicos, además de ser costosos, dañan seriamente al medio ambiente y con esta bacteria; que promueve el crecimiento de la raíz, cuenta con nutrientes en el suelo para ir en busca de cantidades mayores.
La catedrático del laboratorio interacción Planta-Microorganismo, resalta: “Si se trabaja con ellos, hicimos prueba en campos, buscar la bacteria, una vez que la encontramos es aislarla, hacer estudios en el laboratorio y posteriormente llevarlos a campo”.
De ahí ha nacido el interés de los agricultores por este microbio también para estimular el pasto forrajero.