Se conmemora una edición más del Día Internacional de la mujer. Una fecha importante para todas aquellas personas que luchan a diario en pro de la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo en el mundo.
Al respecto, las mujeres siempre han tenido un papel trascendental en la historia moderna del hombre como piezas claves para la formación de las personas. En ocasiones, influyendo mucho más que en solo valores morales, un ejemplo de ello es la influencia sobre la enseñanza alimenticia de los hijos.
Sin embargo, alguna vez te has preguntado si ¿Las mujeres necesitan una alimentación hecha a la medida de sus características físicas? El día de hoy, el Consejo Consultor de Nutriólogos de Herbalife Nutrición® resuelve esta duda para ti:
La alimentación de cada una de las personas, no sólo de las mujeres, debe de estar adecuada a las necesidades nutricionales propias de cada etapa de la vida, y fijando atención en la edad, peso, estado hormonal, actividad física entre otras. Sin embargo, el caso de las mujeres es especial, el cuidado de la figura y la salud es importante para la mayoría por lo que se necesita tener un especial cuidado.
Para las mujeres, la alimentación correcta puede dividirse en etapas debido al metabolismo:
20 a 30 años. En esta etapa las mujeres deben procurar hacer 5 comidas al día (desayuno, media mañana, comida, merienda y cena) y consumir alimentos de todos los grupos todos los días, para fortalecer el rendimiento intelectual. Los mejores alimentos son: lácteos, frutas, verduras y evitar la comida rápida, el pan y los refrescos.
30 a 40 años. Para esta etapa el desequilibrio metabólico es más severo y por ello se recomienda llevar una alimentación completa, rica en nutrientes y baja en calorías, consumiendo todos los grupos de alimentos, con especial atención a las proteínas para aumentar la firmeza de los tejidos. Se necesita también hidratarse bien, consumir fibra, reducir el consumo de sal, comer fruta antes del anochecer y consumir tés que ayuden al drenaje linfático.
40 a 50 años. En esta etapa el metabolismo se ha vuelto lento y el gasto energético es poco. Disminuye el metabolismo de las grasas, por lo que aumenta la retención de líquidos y la grasa se acumula en zonas localizadas, especialmente el abdomen. Para combatir todo esto se aconseja: Ingerir alimentos ricos en fito-estrógenos, como la soya, elegir verduras y frutas frescas, fuentes de fibra y vitamina C, consumir a diario alimentos ricos en calcio, omega-3, anular el consumo de sal y realizar una dieta depurativa de un día, una vez al mes.
Fuente:
cronica.com.mx
