Un grupo de expertos convocado por la Sociedad Mexicana de Pediatría analizó el papel de los sustitutos de azíºcar como herramienta para controlar el peso de aquellos niños y adolescentes que tienen sobrepeso u obesidad.
El equipo, integrado por pediatras y nutriólogos, analizó la evidencia relacionada con la seguridad y beneficios de este tipo de edulcorantes para la población infantil.
En primer lugar, los especialistas corroboraron que los endulzantes sin calorías que actualmente se comercializan en México para endulzar bebidas y alimentos cuentan con la aprobación de las autoridades tanto nacionales como internacionales para que sean consumidos por niños y adolescentes.
Por otra parte, los expertos señalaron que los sustitutos de azíºcar ayudan a disminuir la ingesta de energía y, por lo tanto, pueden ser una herramienta íºtil y segura para reducir el consumo calórico dentro de un plan de alimentación balanceado.
Contrario a lo que muchos piensan, este grupo de especialistas confirmó que el consumo de sustitutos de azíºcar no aumenta el apetito, ni tiene relación con el desarrollo de alergias, padecimientos gastrointestinales, cáncer o alteraciones de la conducta en niños y jóvenes.
El análisis, publicado en la Revista Mexicana de Pediatría en diciembre pasado, concluye que los edulcorantes no calóricos son totalmente seguros y pueden incorporarse dentro de la dieta de niños y adolescentes como una herramienta para combatir el sobrepeso y la obesidad, sobre todo si se mantiene un estilo de vida saludable, acompañado por la práctica habitual de actividad física.
Fuente:
cronica.com.mx